En días recientes se ha llevado a cabo el juicio contra Timothy Jones Jr. quien mató a sus cinco pequeños hijos en 2014 en Lexington, Kentucky, y ahora se han revelado nuevos y escabrosos detalles del caso.
“Papá te amo”, fue lo último que le dijo Merah a su padre y tratar de calmarlo luego de haber visto cómo mataba a su hermanos, pero aún así también la mató estrangulándola, ella era la mayor.
Primero mató a su hijo de seis años, Nahtahn, supuestamente enojado porque había roto un tomacorriente, golpeándolo, sin embargo había mentido en primera instancia que lo había encontrado muerto en su cama.
Luego, estranguló a su hijo Elías, de siete años, con las manos, frente a su hija Merah, de ocho años.
Jones los reveló durante una confesión grabada en video a la policía que se mostró en el tribunal la semana pasada, según The Post and Courier, que estuvieron presentes en el juicio.
Él está luchando contra los cargos de asesinato, alegando que estaba escuchando voces, que es esquizofrénico y que debe ser declarado inocente por causa de la locura.
Después de matar a los tres hijos mayores, usó un cinturón para estrangular a su hijo Gabriel, de dos años, y a su hija Abigail, de un año. Gabriel, de dos años, también le dijo: ‘Te amo’ antes de morir.
El hombre de 37 años luego envolvió sus cuerpos en mantas y los cargó en su auto, colocándolos en las tablas del piso de su Cadillac Escalade.
Estuvo huyendo durante días hasta que la policía lo arrestó en la línea estatal con Mississippi.
“No querían irse. No querían que les quitaran la vida”, dijo su padre en su entrevista con la policía.
Afirmó que creía que tenía que matar a sus hijos porque creía que estaban conspirando contra él.
Dijo que había tenido pensamientos acerca de matarlos antes, pero no había actuado en consecuencia, hasta ese día.
Con los cuerpos en su camioneta, luego condujo durante varios días, deteniéndose en las tiendas de Dollar General y comprando suministros, con la intención de quemarlos.
Admitió que sabía que lo atraparían y que simplemente estaba tratando de ganar tiempo.
Antes de ser arrestado, sacó $ 500 y planeaba ir a Las Vegas, dijo.
Al final de la entrevista, culpó de los asesinatos a su hijo Nahtahn y dijo que si hubiera admitido que había roto la toma de corriente, no habría disparado y matado a todos.
La semana pasada, su ex esposa, Amber Kyzer, madre de los cinco niños pequeños se desmayó durante su testimonio el lunes en el juicio de pena de muerte de Jones.
“Ustedes son mi mundo y mami y papá fueron realmente bendecidos por tenerlos”, dijo Kyzer, deteniéndose, luego tomó su cabeza entre sus manos en el estrado de testigos y lloró desconsoladamente.
Estaba leyendo una carta que había escrito para consolar a los niños sobre el divorcio que estaba recibiendo de su padre.
“Oh Dios. Oh Dios. Mis bebés. Mis bebés”, dijo Kyzer y lloró cuando el juez se apresuró a sacar al jurado de la sala del tribunal.
Hay cuatro resultados posibles en el juicio: culpable, culpable por razón de locura, no culpable por defecto mental, o no culpable.
La madre también testificó que se enamoró de Jones porque él era inteligente, consumado y parecía tener su vida juntos.
Pero ella dijo que después de que se casaron, él se puso estricto con su religión y le exigió a ella seguirla.
“(Él creía que )Las mujeres deben ser vistas y no escuchadas. Yo estaba simplemente para cuidar de los niños. Para mantenerlos fuera de su camino”, dijo Kyzer.
Después de que se divorciaron, Kyzer no pudo pagar un abogado, por lo que aceptó la custodia compartida con Jones teniendo la custodia física de los cinco hijos, ese día habían ido a visitar a su padre.
