El Templo Satánico, una organización de adoradores del diablo en Estados Unidos, consiguió oficialmente el nombramiento por parte del gobierno como “lugar de adoración” que les permitirá no pagar impuestos, informó el grupo en un comunicado.
El Servicio de impuestos internos de Estados Unidos (IRS, por sus siglas en inglés) -una agencia encuadrada en el Departamento del Tesoro- le otorgó al Templo Satánico el mismo estatus como organización sin fines de lucro que las iglesias, sinagogas y mezquitas tienen en el país, con el que estará protegido por leyes federales.
Habitualmente se confunde a este Templo con la Iglesia de Satán, un grupo fundado en la década de los 60 del siglo pasado. Sin embargo, el Templo, establecido en la ciudad que albergó los juicios por brujería de Salem en el siglo XVII, considera que el satanismo no es apolítico, a diferencia de la Iglesia Satánica.
El cambio de estatus del IRS llega cuando el vicepresidente Mike Pence, junto a otros conservadores del Partido Republicano, han llamado a revertir la llamada “Enmienda Johnson”, incluida en el Código de rentas internas de 1954, que prohíbe que las organizaciones exentas de impuestos respalden o se opongan a candidatos políticos.
El IRS consideraba al Templo Satánico como una “organización religiosa”, pero no como una iglesia propiamente dicha, con todos los derechos que eso conlleva. Pero ahora, con la nueva clasificación, estará exento de presentar declaraciones de impuestos federales. El IRS no ha emitido ningún comentario al respecto.
De acuerdo con Bloomberg, la IRS ya refleja al Templo Satánico como una organización con estatus de iglesia. En el pasado, la administración de Donald Trump ya criticó una concesión del estatus de iglesia, cuando el IRS reconoció a la Iglesia de la Cienciología.
“Este reconocimiento nos ayudará a que el Templo Satánico tenga el mismo acceso a los espacios públicos que tienen otras religiones, ratifica nuestra posición en las cortes cuando combatamos contra la discriminación religiosa y nos permite aplicar para las subvenciones gubernamentales para organizaciones basadas en la fe”, destacó el Templo en sus redes sociales.
La Agencia Católica de Noticias señaló por su parte que, “a pesar de su lealtad abiertamente demoníaca”, el Templo había sido fundado por ateos profesos y la imagen que proyectan “parece ser una provocación deliberada a lo que el grupo percibe como una interferencia de la religión en la plaza pública”.
En agosto del año pasado, por ejemplo, miembros del Templo Satánico colocaron una estatua de Baphomet, la representación del macho cabrío alado, en el capitolio del estado, para protestar y pedir el retiro de un monumento dedicado a los Diez Mandamientos.