Un avión privado en el que viajaba el manager de la cantante Pink, y otros miembros de su equipo, se estrelló e incendió este martes por la madrugada en Dinamarca.
Las diez personas que se encontraban a bordo de la aeronave pudieron escapar de manera milagrosa. Ninguno resultó herido.
El equipo de la cantante estadounidense abordó el jet después de que ella diera un concierto en Oslo, Noruega. Afortunadamente la famosa no subió al avión.
Estaba programado para que aterrizara en el aeropuerto de Aarhus, pero por una razón que aún desconocen las autoridades, el aeroplano no pudo descender de manera correcta y se incendió en el cielo, para después estrellarse contra el césped a las 12:38 de este martes 6 de agosto.
Un ciudadano británico, cuatro estadounidenses, dos australianos y dos miembros de la tripulación de Alemania y Rusia fueron llevados a un hotel cercano a pasar la noche, después de que los bomberos lograron apagar las llamas del avión.
