La ciudad de Filadelfia y el estado de Florida declararon crisis de hepatitis A ante el aumento en los casos del virus.
En Filadelfia, se han reportado 154 casos este año, frente a únicamente seis en 2018. Florida reporta que la tasa se cuadruplicó hasta registrar 2.034 casos en los últimos ocho meses, en lugar de los 548 que se registraron todo el año pasado, de acuerdo con los registros del Departamento de Salud.
Las tasas también son altas en otros estados, incluido Kentucky, con 4.793; Ohio con 3.220; Virginia Occidental con 2.528; y Tennessee con 2.022 casos.
Desde 2016, ha habido 22.566 casos en 25 estados, reportaron los CDC. De estos casos, 13.352, (59%), tuvieron que ser ingresados en alguna institución de salud y 221 personas murieron.
El mayor desafío en Filadelfia es el uso de drogas por vía intravenosa, la causa en el 67% de los casos de la enfermedad, además de la alta tasa de gente que vive en la calle, más de la cuarta parte del total.
“Si bien no hay una causa exacta que podamos identificar, Filadelfia había estado bajo las garras de la crisis de los opioides, que el comisionado de Salud calificó como la peor epidemia aquí en más de un siglo”, señaló James Garrow, portavoz del Departamento de Salud Pública en la ciudad.
En el caso de Florida, el jueves fue declarada la emergencia de salud pública ante el aumento en los casos, lo que permite a funcionarios de salud examinar y tratar a personas sospechosas de estar contagiadas por el virus.
Los condados con más casos son Brevard, Citrus, Glades, Hernando, Hillsborough, Lake, Liberty, Manatee, Marion, Martin, Okeechobee, Orange, Pasco, Pinellas, Sumter, Taylor y Volusia. La mayor parte de esas zonas están en la región central y oeste de la Florida.
Funcionarios del estado pidieron a las personas con afecciones subyacentes, como VIH / SIDA, enfermedad hepática crónica o acceso deficiente a la atención médica, como las personas sin hogar, que busquen tratamiento preventivo.
La hepatitis A es causada por un virus que infecta el hígado y se propaga a través de las heces de las personas infectadas.
A menudo se propaga cuando las personas infectadas no se lavan las manos después de ir al baño, ya que las heces se pueden transferir a alimentos, bebidas y objetos.
La propagación de la enfermedad se puede prevenir mediante la vacunación.
“Todas las personas deben lavarse las manos con agua y jabón durante por lo menos 20 segundos”, limpiar regularmente las duchas y baños privados, advirtió el Departamento de Salud de Florida e informó que el gel antiséptico no mata el virus.
También es necesario que la población se vacune, ya que la dosis brinda una protección de 95% a personas sin problemas de salud, durante un periodo de 11 años.
Los CDC recomiendan que se vacunen todos los niños de 1 año, personas que viajan a países donde la hepatitis A es común, la familia y las personas que cuidan a adoptados de países donde se ha reportado la presencia del virus, hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres, personas que usan drogas inyectables y de otros tipos, ciudadanos con enfermedades hepáticas crónicas, personas que viven en la calle, quienes trabajan con primates infectados en laboratorios de investigaciones, personas que tengan contacto directo con población que presenta el mal y cualquiera que busque mantenerse inmune.
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