“Me demoré en llegar -dijo esta mañana el presidente electo al iniciar su discurso en el encuentro del Grupo de Puebla– porque tuve casi una hora de charla con el presidente de Francia; una charla espléndida, en la que hablamos de Lula, de Bolivia, de Chile, de todos los problemas de la región…”
“Sentí que el presidente Macron me entendía -siguió diciendo Alberto Fernández-, que entendía que en Bolivia una clase dominante no se resigna a perder el poder”. Y continuó con una encendida defensa de Evo Morales, “el primer presidente boliviano que se parece a los bolivianos”, parafraseando una vieja definición de Cristina Fernández de Kirchner.
Efectivamente, el presidente francés, Emmanuel Macron, llamó esta mañana por teléfono a Alberto Fernández a su departamento de Puerto Madero, para un diálogo acordado hace un par de días. Además de los temas de la agenda bilateral -comercio, inversiones, etc- la conversación incluyó una común preocupación por la crítica situación en Chile, en Bolivia y por las dificultades surgidas en la relación entre Argentina y Brasil.
El presidente electo espera también contar con el respaldo del gobierno francés en la negociación que debe imperativamente encarar con el Fondo Monetario Internacional con miras a aliviar la carga de la deuda.
Emmanuel Macron le va a proponer a Fernández fechas para una posible visita a Francia como presidente electo; es decir, antes del 10 de diciembre próximo, fecha en la que Mauricio Macri le traspasará los atributos del mando.
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