Para el Fondo Monetario Internacional, si Argentina sigue el programa acordado con el organismo se corregirán los desequilibrios económicos y el país ganará confianza. Pero esto, afirman, no se logrará de un día para otro. “Es un proceso largo”, afirman.
El jefe del Departamento del Hemisferio Occidental, Alejandro Werner, dijo en una conferencia de prensa en el marco de la Asamblea de Primavera del FMI que se desarrolla en Washington, que tienen “una confianza importante de que si Argentina continúa con los lineamientos, que son la base de diseño del programa, el país logrará corregir los desbalances macroeconómicos”.
El funcionario señaló que si estas correcciones permanecen se generará “certidumbre para que se dé un proceso más dinámico de inversión y crecimiento”. Sin embargo, Werner señaló que “la confianza en el mantenimiento de esos equilibrios no es algo que se gana en una noche. Básicamente, muchos de los países que lo han logrado han venido de menos años de incertidumbre que los que ha pasado Argentina. Es un proceso largo”.
Y agregó que lo importante es continuar corrigiendo los desbalances externos e internos y así generar incentivos adecuados para la inversión tanto pública como privada. “Este es el camino adecuado”, afirmó.
Sin embargo, Werner fue cauteloso con las proyecciones sobre nuestro país. “Los pronósticos económicos son pronósticos y tienen un nivel de incertidumbre importante. Todavía más en una economía con el grado de volatilidad y de fragilidad que tiene hoy la economía Argentina”. Y dijo, por ejemplo, que el último pronóstico (de crecimiento e inflación) se hizo hace algunas semanas, y que no se había incorporado el “brote de volatilidad financiera” que se vio en los últimos días.
“Hay que ver cuál va a ser el efecto de esto sobre la economía y como se estabilizan los mercados después de este repricing en el mercado cambiario y este ajuste de las tasas de interés nominales”, señaló. El jueves, Christine Lagarde, dijo que el plan “funciona” y que el rumbo debe continuar más allá de diciembre.
El Fondo ha destacado en sus reportes que la incertidumbre electoral es un factor que este año puede tener cierto impacto en la economía. Según pudo saber Clarín, en diversos encuentros con inversionistas en Washington al margen de la Asamblea, en los que participaron el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne y el jefe del Banco Central, Guido Sandleris, y otros funcionarios, el Gobierno y el BCRA se han mostrado tranquilos en que tienen capacidad de fuego para frenar presiones alcistas sobre el dólar antes de las elecciones.
Están confiados en que, con la liquidación de dólares del sector agropecuario, más los 60 millones diarios que en los próximos días comenzará a vender el Tesoro, se podrá mantener la divisa en un nivel que no ponga nervioso al mercado.
Los funcionarios argentinos han tenido varios de estos encuentros organizados en general por bancos. Solo en uno de ellos, planificado por el JP Morgan el miércoles, llegaron a nuclearse unos 400 interesados en nuestro país, básicamente bancos de inversión, fondos e inversores institucionales.
Según recogió Clarín entre diversos asistentes a estos encuentros, que son reservados, las preguntas del público giraron en torno a tres ejes: la banda de flotación cambiaria, el dólar y las elecciones.
Los funcionarios respondieron que están conformes con la amplitud de la banda porque “es manejable” y que el Gobierno tiene “herramientas” para hacer frente a una posible volatilidad en este período electoral. Resaltaron que brinda previsibilidad el hecho de que el Tesoro tenga una suma fija de 60 millones de dólares por día para liquidar. Además, según cálculos de Hacienda, el 93% del ahorro argentino está hoy dolarizado.
En Washington creen que buena parte del actual nivel de riesgo país se debe a la incertidumbre electoral. Calculan incluso que, si se tuvieran en cuenta solo los números fríos, debería estar a 400 puntos (hoy supera los 800) porque, dicen, la situación macroeconómica está mejor que hace un año.