Oscar González Oro, de 67 años, lleva siete meses de feliz noviazgo con Mauro Francisco, de 37, a quien todos apodan Pancho. A los dos meses de comenzada la relación hicieron público, a través de las redes sociales, el amor que los une. Hoy, martes, ambos se sentaron en el diván de “Cortá por Lozano” (Telefe) y, sinceridad total, hablaron de las intimidades de la pareja.
Entre otras cosas, El Negro González Oro contó que han hecho el amor en lugares poco convencionales como el ascensor y el auto, y ante la pregunta de Verónica Lozano sobre si habían experimentado el sexo en la playa, El Negro fue contundente: “No, en la playa no, porque fuimos una sola vez a Punta del Este y no, no lo hicimos porque ahí te sacan fotos”.
Entre otras cosas, ambos enamorados contaron cómo se conocieron. Todo llevó su tiempo, desde la insistencia de Pancho escribiéndole a El Negro para hacerle saber que se sentía atraído por él, hasta la decisión del conductor de bloquearlo, porque en aquel momento él estaba en pareja, hasta su posterior llamado a Pancho para conocerse personalmente.
Broma va, broma viene, Pancho contó por qué no se quiere casar con González Oro: “Primero, está el tema de las etapas -dijo-. Antes, vivía en un monoambiente muy chiquitito que no tenía ni luz, y ahora me mudé a uno con una terraza hermosa. En principio, quiero estar más en mi casa”.
Dicho eso, Pancho añadió: “Después, porque dormimos una noche y el señor era una orquesta… Yo me fui del cuarto, me fui al escritorio que está al lado, cerré la puerta a pesar de que se escuchaba igual, y me vino a buscar con la promesa de que no iba a roncar más”.
Tras semejante acusación, El Negro planteó su queja: “Yo también me quedé una noche en Las Cañitas, y él tenía un turbo ventilador a los pies de la cama, de los que pensé que no existían más. Porque tiene un aire acondicionado, pero el miserable no lo prende”.
Después, El Negro González Oro fue por más en las críticas a los hábitos de su novio: “Aparte, tiene un Ipad pedorro, y él no se puede dormir sin escuchar una entrevista. Sea de lo que sea. ¡Y me fumé a Nicolás Cabré durante una hora y el HDP dormía! Yo no sabía cómo apagar el Ipad. Y me fui al living”. Los gajes de la convivencia…
AS